“En otras palabras cuando decimos
que el Estado mejor es aquel en que los hombres viven en concordia, me refiero
no a una vida humana definida por la circulación de la sangre y las demás
funciones comunes a todos los animales, sino, sobre todo, por la razón, ánimo y
vida del espíritu”
“Mientras que un pueblo libre se
guía por la esperanza más bien que por el miedo, el que está sometido se guía
por el miedo más que por la esperanza”
“El contrato o leyes por las
cuales la multitud delega su derecho a una asamblea o a un hombre, deben, sin
duda alguna, romperse cuando el bienestar general reclame semejante infracción”
“(Los gobernantes) No pueden hacer
el bufón, ni infringir o ignorar abiertamente las leyes de las cuales han sido
ellos mismos autores. En ese caso no mantendrían la autoridad, pues no le es
posible ser y no ser al mismo tiempo”
“Por último no podrán (los
gobernantes) asesinar o robar a sus súbditos,
ni hacerse cómplices de crímenes tan graves, sin que el miedo se cambie en
violencia. Y por consecuencia el estado político se transforme en estado de
guerra”
Baruch
Spinoza
“Tratado
Político” (1670 DC)